Las islas griegas se han consolidado como uno de los destinos más demandados por turistas de todo el mundo. Repartidas entre las aguas del mar Egeo y del Jónico algunas islas se han convertido en auténticos iconos del turismo internacional, como Creta, Mykonos o Santorini. Sin embargo, muchos itinerarios de cruceros actuales permiten descubrir una Grecia diferente, más tranquila y genuina, a través de destinos menos masificados como Patmos, Paros, Naxos, Kithnos, Ikaria, Symi o Lipsi.
Entre esas joyas menos conocidas encontramos Kastellorizo, la isla más oriental de Grecia y la última antes de llegar a la costa turca. Normalmente, queda fuera del radar de muchos viajeros, pero merece la pena visitarla, ya que ofrece un lugar singular, de terreno predominantemente montañoso, de paisajes abruptos y un único núcleo urbano: la ciudad de Kastellorizo, también conocida como Megisti.
La ciudad de Kastellorizo, en Grecia se despliega alrededor del puerto, con un trazado urbano irregular y casas de fachadas coloreadas junto a la ladera. La zona habitable se concentra en un valle costero encajado entre dos zonas montañosas, mientras que el resto de la isla se levanta en alturas escarpadas y costas de acantilados. Si tu itinerario incluye Kastellorizo, en Grecia, estás de enhorabuena, porque te vamos a mostrar Kastellorizo y qué puedes ver para aprovechar esta escala.
Pasea por la ciudad y el puerto de Kastellorizo
La ciudad de Kastellorizo o Megisti es el único núcleo de población de la isla y, por tanto, es su capital. Su vida gira en torno al puerto, que actúa como punto de encuentro para los viajeros. El ambiente es animado junto al mar, pero basta alejarse unos metros para encontrar unas calles tranquilas donde el tiempo parece transcurrir más despacio.
Al pasear por sus calles podrás apreciar una imagen muy distinta de la que solemos asociar a las islas griegas. Aquí, predominan casas altas y estrechas, pintadas en tonos ocres, rojos, amarillos y azules intensos, ofreciendo un paisaje urbano muy pintoresco, enmarcado por montañas áridas y un mar de tonos azules profundos. Durante el paseo, encontrarás iglesias, una mezquita y pequeñas plazas donde relajarte en Kastellorizo, en Grecia.
Castillo de los Caballeros de San Juan

Si viajas a Kastellorizo y no sabes qué ver, el Castillo de los Caballeros de San Juan es, sin duda, uno de los lugares que no pueden faltar en tu ruta. Se trata de una fortaleza medieval levantada en el siglo XIV por la Orden de San Juan sobre una roca de color rojizo, origen del nombre de Castello Rosso. Hoy el castillo se encuentra en ruinas, pero todavía se conservan partes que permiten imaginar qué aspecto tuvo en origen. La subida hasta la fortaleza requiere salvar un desnivel considerable, pero el esfuerzo merece la pena porque ofrece las vistas más espectaculares de Kastellorizo que puedes ver de esta ciudad, con la costa turca recortándose en el horizonte.
La tumba licia, otro imprescindible de Kastellorizo
Muy cerca del castillo se encuentra uno de los monumentos más singulares de Kastellorizo en Grecia: la tumba licia. Se trata de una tumba excavada en la roca alrededor del siglo IV a. C., con una fachada de inspiración dórica que recuerda a un pequeño templo griego. Presenta pilastras, base, friso, cornisa y un frontón sobrio enfocado hacia el mar.
Esta tumba es la única de estilo licio que se conserva en todo el territorio griego, lo que la convierte en una pieza arqueológica excepcional. Se encuentra justo bajo el castillo y se accede por una escalera bastante empinada, pero el camino ofrece unas vistas maravillosas de la bahía y de las islas cercanas, por lo que es un lugar indispensable si visitas Kastellorizo y no sabes qué ver.
Si estás en Kastellorizo tienes que ver la Catedral de San Constantino y Santa Elena

En una posición elevada, se alza la Catedral de San Constantino y Santa Elena, un templo de dimensiones sorprendentes para el tamaño de la isla. Su fachada encalada se organiza en tres grandes arcos apuntados sostenidos por columnas blancas, que forman una especie de pórtico resguardado del sol y la lluvia. En los arcos aparece inscrito en griego el nombre de los santos a los que está consagrada. A un lado, encontrarás un campanario de varios pisos, visible desde buena parte del puerto. El interior sorprende por el contraste entre las bóvedas neogóticas de crucería, blancas y desnudas, y la profusa decoración de la zona dedicada al culto. Un lugar que no te puedes perder en Kastellorizo.
Iglesia ortodoxa de San Jorge de Pigadiou
En el extremo occidental de la localidad se encuentra la Iglesia ortodoxa de San Jorge de Pigadiou, otro templo que merece una visita durante tu escala. A diferencia de la catedral, este edificio se integra casi por completo en el entorno urbano, con una fachada de blanco roto y detalles en beige y tonos terrosos que marcan cornisas, marcos y elementos constructivos. Apenas sobresale en altura sobre las casas colindantes, aunque destacan la cúpula y la torre del campanario.
La cúpula, de color terracota, se eleva sobre un tambor que actúa como linterna para iluminar el interior, coronado por una cruz. El campanario, de altura similar, incorpora relojes en sus cuatro caras y remata en una pequeña cúpula con otra cruz. En el interior, el espacio se organiza en tres naves separadas longitudinalmente, con un crucero bajo la cúpula. Las paredes blancas y los detalles en azul crean un ambiente sobrio en el que destacan las pinturas de iconos y donde reina una atmósfera casi irreal.
El Museo de folklore de Kastellorizo

Uno de los lugares más curiosos de Kastellorizo que debes ver es el Museo de folklore, instalado en la antigua mezquita del puerto. El edificio fue levantado a mediados del siglo XVIII por Osman Ağa y funcionó como lugar de culto musulmán hasta principios del siglo XX. En la actualidad, su minarete sigue destacando en skyline de la ciudad, pero el interior alberga una exposición dedicada a la historia y la vida tradicional de la isla.
Allí encontrarás una exposición de trajes tradicionales, cerámicas, puertas de madera tallada, cerraduras antiguas, muebles, textiles, bandejas metálicas, tazas, pequeñas obras de arte y armas. Además, si buscas cruceros baratos para disfrutar de unas vacaciones espectaculares en Kastellorizo, puedes reservar a través de nuestro buscador de cruceros y disfrutar de tus vacaciones.
Si estás en Kastellorizo tienes que ver el monasterio de San Jorge del Monte
En la parte alta de la isla, hacia el sur, se encuentra el monasterio de San Jorge del Monte, un complejo hoy abandonado, pero en proceso de rehabilitación, que fue erigido en el siglo XVIII. Llegar hasta él requiere subir más de cuatrocientos escalones que serpentean por la ladera de la montaña, pero el esfuerzo compensa con creces. El monasterio cuenta con una pequeña iglesia adornada con iconos bizantinos de notable calidad, estancias que funcionaron como celdas y una minúscula cripta subterránea.
Si tienes tiempo, visita la Cueva Azul

Si tu escala lo permite, una de las mejores cosas que ver en Kastellorizo, en Grecia es la excursión en barca a la Cueva Azul, situada al sur de la isla. En el interior, se abre en una gruta de unos setenta y cinco metros de longitud, donde la luz que se filtra por el agua tiñe todo de una asombrosa paleta de tonos azules. Las paredes y el techo muestran formaciones de estalactitas que ofrecen un espectáculo geológico natural. Es uno de los lugares más especiales de Kastellorizo y de las islas griegas en general.












